Rincón del Ibérico

El jamón ibérico es un producto delicado que conviene cuidar para que se mantenga en óptimas condiciones.
El jamón se debe guardar bien tapado en un lugar fresco y oscuro que no sea excesivamente frío.
Una vez cortado es recomendable acabarlo al momento, y nunca cortar más de lo que se va a comer.
Al terminar una sesión de corte, hay que proteger la zona con algunos de los trozos mas gruesos de tocino y corteza, sacados al principio, de forma que la grasa superficial se mantenga siempre fresca. Adicionalmente, también se puede envolver el jamón con un papel parafinado o film transparente.
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